domingo, 31 de enero de 2010

Desvarios varios

El 2009 descansa en paz. 365 días consumidos como un refresco en verano, casi sin darme cuenta. Metidos de lleno en la vorágine del 2010 es hora de reflexionar, de hacer balance, de marcar objetivos, de hablar por hablar...


De momento y en lo que aquí nos afecta, sigo enamorado de este deporte y a estas alturas ya me resulta raro... Nunca fui constante en nada, quizás esa sea, junto a mis prontos de mal genio las 2 peores cualidades que me lastran y contra las que peleo día a día. Sin embargo y, salgo algún pequeño bajoncillo, la naturaleza me tira cada vez más y la escalada es el medio perfecto para disfrutarla aunque no el único.


Este año hemos abierto el abanico, y me he vuelto a calzar las Bestard Sherpa, hemos pisado unos cuantos senderos y nos hemos sentido de nuevo llenos... Picos de Europa y La Pedriza, seguro que hay lugares más hermosos... Pero yo no los conozco.


Los días de nieve o de lluvia lejos de producir frustración son tan bienvenidos como los demás, simplemente cambiamos los pies de gato por las botas, desempolvamos los Gore Tex y nos largamos a La Pedri a explorar nuevos rincones o a refrescar senderos ya andados. Me gusta tanto el trekking, que supongo que si llego a viejo, un día me olvidaré de subirme a las piedras y me propondré el llegar tan lejos como mis pies me lo permitan... De momento ya tengo GPS, un Garmin Legend HCX, regalo de Gema... sería perfecto si supiera usarlo... pero de momento es otra vía por encadenar.


Correr. Desde la opo no corría con tanta constancia como ahora: Lunes y miércoles: llueva, nieve, haga frío o calor... Es increíble. Con lo que he odiado toda mi vida correr, como puede ser que desde que crucé la frontera de los 30 pueda obtener tanta satisfacción con esa misma actividad.

Hace no tanto tiempo pasé una época muy dura, se me juntaron mil cosas, me sentí bastante sólo y sólo podía correr... Corría hasta 4 y 5 veces en semana una media de 40 minutos... esos 40 minutos me hacían sentir bien todo el día. Ahora las cosas están muy bien y sin embargo, cuando llego a casa después de correr, el chute de endorfinas me hace sentir absolutamente lleno de todo, plenamente consciente de la buena época que estoy viviendo.


Gema está detrás, en medio y delante de todo. Aunque no se ya que es de su vida nunca le agradeceré lo suficiente a Feito que aquella noche me llevará al Berlin Cabaret y me tuviera allí hasta intempestivas horas de la mañana, me dijo "En este garito se entra sólo y se sale acompañado" y bien que acertó.


Escalar... Me estoy hinchando a encadenar 6c's, Este enero han caído tres y cada vez con menos esfuerzo. Sin embargo sólo "La primera del siglo XXI" en las Placas del Tranco, me ha dejado poso. La "Tuercebotas" y "San Satanás" me han dejado algo frío, todo lo contrario que repetir después de un montón de años "La Picadura del Cerdo" un 6b+ en el que la naturaleza y el equipador parecían predispuestos a dar lo mejor de si mismos.


Proyectos muchos. En lo relativo a la escalada consolidar, y probar algún 7a. Pero sobre todo me apetece incrementar notablemente el número de vías clásicas... mi apuesta este año es hacer una clásica al mes. Ha llegado la hora de quitar el óxido a los friends y a las cuerdas de 9... Mi reto es seguir creciendo y esta es mi asignatura pendiente.

jueves, 21 de enero de 2010

Salomon XA PRO 3D ULTRA


Me encantan las comparativas de material bien hechas, críticas y con conclusiones finales útiles para quien las lee. Sin embargo este no va a ser el caso, pues nunca antes había tenido unas zapatillas para correr por montaña y tampoco soy experto en zapatillas para correr en general... Hasta ahora, siempre me ha valido con las playeras más chulas de Adidas que haya encontrado en el momento de obligada renovación.
Cuando compré este par, si tenía algunas cosas claras. Llevo ya algún tiempo en que cada vez me gusta más salir a correr, que no me gusta correr por asfalto y que tengo por objetivo llegar a correr por el monte.
Así las cosas y con algo de dinerillo en el bolsillo, esta vez obvié la gama Adidas y me decanté por este modelo por las "poco técnicas razones siguientes": Quería un modelo específico de trail running, que fuera de una marca vinculada específicamente a deportes de montaña y me apetecía mucho probar el sistema de lazada rápida de Salomon. Además el aspecto puramente estético de la zapatilla me gustó desde el primer momento.
Ya llevo unos pocos meses con ellas y unos cuantos Kilómetros y es hora de sacar conclusiones:
En primer lugar son lo más ligero que he tenido nunca en zapatillas, de cualquier clase y para cualquier propósito.
El sistema de cordones es comodísimo y no se aflojan jamás. En esto superan claramente a los cordones convencionales pero no en el ajuste. Tengo la sensación de llevar algo suelto el pie en la zona de los dedos y cuando ajusto los cordones para corregir esa sensación, la molestia se traslada al empeine porque el cordón es muy fino y se clava si aprietas demasiado. Esa sensación puede deberse al sistema de ajuste o quizás a que los cordones no llegan simétricamente hasta la zona cercana a los dedos, sino que sólo se extiende hasta allí un "ramal". En la práctica todo esto desaparece una vez iniciada la carrera porque el pie no baila dentro de la zapatilla y se siente protegido.
En cuanto a la comodidad corriendo es indiscutible, su ligereza y su cómoda pisada deja todo el peso de la carrera en tus pulmones, corazón y ganas de sufrir. Esta comodidad la he testado siempre en circuitos de tierra, básicamente en el parque de San Isidro. En asfalto habría que verlas, pues peso 80 kilos y he leído por ahí que son mejorables en amortiguación... El caso es que no las compré para correr por cemento ni ese es tampoco su propósito.
En cuanto a su duración no lo sé, aun presentan aspecto de nuevas (quitando el barro que las adorna), pero solo llevan conmigo 3 meses y sólo llevo dos corriendo regularmente dos días en semana. Tampoco las he probado aun (y haré una extensión a esta entrada cuando lo haga) por senderos de montaña... La verdad es que robustas no es que parezcan mucho, pero es que si lo fueran no podrían pesar lo que pesan ni ser lo cómodas que son... Yo creo que están en la línea de las de su sector y espero que eso suponga un buen compromiso que permita amortizar lo que valen... entorno a los 105 euros en Deportes Tornasol en la Calle Embajadores.

domingo, 17 de enero de 2010

Un poco de todo.

...Va pasando el tiempo y, cuando te quieres dar cuenta hace casi dos meses que no me dejaba caer por aquí... parte de este tiempo se debe a los de la ADSL de Vodafone cuya instalación iba para una semana y pasado mes y medio dimos por imposible. Al final Telefónica nos sacó las castañas del fuego, en 4 días y por menos dinero. Ahí queda eso, para quien pueda interesar.

En estos días se ha metido el invierno, un invierno precioso, con todo el aparato meteorológico que le acompaña y claro, algunos fines de semana no se ha podido escalar, así que nos hemos calzado las Bestard Sherpa que me regaló María y las Bestard Spider K Lady que le cayeron por el cumple a Gema y nos hemos "echado al monte".

La Pedriza es siempre hermosa, pero desde mi punto de vista, es en invierno cuando se viste con sus mejores galas y su magia se hace indiscutible.

En fin de año, justo al caer la noche aparcábamos en el parking de El Tranco. Estaba nevando débilmente y hacía un intenso frío seco, propio de Madrid. Pepa, solo llevaba 3 semanas con nosotros y supongo que se pensaba que nos habíamos vuelto locos o algo así, porqué no quería ni bajar del coche.

En el camino hacia el Refugio Giner, la débil nevada se tornaba por momentos en ventisca y se nos metía en los ojos... a medida que la temperatura se aventuraba mar adentro bajo los cero grados nosotros entrábamos en calor y nos sentíamos más y más felices por empezar el año juntos y entre tanta belleza.

Una hora después los tres entrábamos por la puerta del Refu y mientras nosotros nos incorporábamos a los canapés y demás prolegómenos de la cena, Pepa iba de unos brazos a otros encantada de la vida. La Pepa en Musgogénesis con menos de tres meses

Guzmán y Luis, se lo saben montar bien, son buena gente y saben atraer a buena gente y en un ambiente tranquilo y relajado oímos desde una radio de bolsillo las doce campanadas del reloj de la Puerta del Sol y cruzamos la línea del 2010.

Musgogénesis recibió nuestra visita por primera vez... no habíamos ído nunca y aprovechamos para compartir la aventurilla de la aproximación y de la jornada de escalada con Ignacio, el hermano de Gema, que se volvía a poner un arnés después de ¿30 años? El día salió redondo y acabamos en La Jara tomando el avituallamiento imprescindible junto a Almu, Antonio y Zulema, Ignacio encajó bien en todo el circo y nos gustaría que no demorase demasiado su próxima visita.

Ignacio en el Espolon Adolfinauer
Otro día reseñable fue la visita a El Vellón. Un chico que se llamaba Ernesto y con el que tenía buen trato me dijo un día de hace algunos años que el era pedricero puro y que la única vía que tenía encadenada de esta escuela era "San Satanás" (6c+) y que le salió porque era una placa... Desde ese día la tenía en mente y hasta estas fechas no me había visto capacitado para probarla... me costó un poco pero cayó, eso sí en 3 visitas y 8 pegues en total, que todo hay que decirlo. De todas formas me acordé de él y me hubiera gustado poder contárselo.

Otras visitas las hemos hecho a las Placas del Tranco... la verdad es que no las tenía en mucha consideración y de repente he descubierto que tiene unas pocas, pero selectas vías... Todo lo que he probado por esta zona es bueno, desde los quintos hasta el 6c que aun se resiste... El tiempo sólo nos ha dejado saborear el sector en pequeños sorbos, pero aun nos quedan una o dos jornadas allí para pelear la Gema y yo por nuestros pequeños trofeos de piedra.

Uno de esos días que fueron especiales en este "inventario" del último mes y medio que no goza de orden ni concierto en lo cronológico, es el día que nos volvimos a juntar además de con la Zule, Almu y Antonio, con Susana y Javi, ya de vuelta de su periplo por Marruecos. El grueso del pelotón y la Pepa, hicimos la ruta del Collado Cabrón que estaba llena de nieve y hielo y todos juntos compartimos mesa y mantel en el Refugio Giner.

Son estas cosas sencillas las que hacen merecer la pena la vida y las que a mí me la llenan de sentido... Este 2010 podría ser un gran año ¿Por qué no?