viernes, 8 de julio de 2011

Maneras de vivir

...Que no, que yo paso.

¿Pero entonces?

Pues eso.

¿y ahora?

Pues lo de siempre.

¿No te importa?

Creí que era importante... pero yo es que soy míope y bien mirado y por una vez, he salido ganando.  En realidad me habían colado un billete falso.

¿Pena?

Lástima.
.....

Después de un mal sueño me desperté con frío, duchita de agua caliente y el milagro habitual:  Retorno a la vida.  La bici limpia y engrasada, los bártulos de escalada esperando acción y un par de proyectos por culminar. Pepa mueve el rabo contenta;  Gema me ha hecho un café ¿De qué nos quejamos?

7 días, un 6b+ a vista, probablemente el 6a+ más largo de Patones y una temperatura perfecta.  El domingo subimos de nuevo a las Zetas... Los planes nos han salido un poco mal y llegamos a Cantoco con la barrera bajada y el Lorenzo mosqueado.   ¿Somos marines o que somos?

Encaramos la ruta circular por su vertiente más dura (Dícese en sentido horario),  Gema renuncia a completar la ruta, y yo a subir a la Nava pero nos salen 45 kilómetros y a pesar del machaque estamos satisfechos... Yo he conseguido no bajarme de la bici, Gema se ha quedado a un kilómetro del Collado de los Pastores y casi se lamenta de haberlo tocado con los dedos...

Aun nos queda un pegue antes de las vacances... y como decía el Santi, "...Mucho se tiene que torcer la noche..."


El jueves quedé con Paco, Pardeamos un poco, hablamos de suspensiones de nuestras chicas, el de su hija y yo de mi perra... Sin darnos cuenta otros 45 kilómetros antes del Aquarius de despedida.... Gema está cansada, la recojo en el Parque junto con Pepa que sigue con su ojo a la virulé.

Cenamos una lasagna cortesía de mi hermana.

¿Dónde coño habré puesto las llaves?

Me la he vuelto a jugar en la Primitiva.

La vida sigue.