domingo, 29 de marzo de 2009

El Gusarapo-La Pedriza

El Gusarapo es el otro subsector dentro de El Alcornocal, pero con una personalidad muy diferente a la del Miguel Angel Blanco. Por un lado, las chapas estás más juntas, y por otro, las vías son más cortas, menos bonitas y menos intensas. Habría que añadir que está aún más cerca de la parte urbana de Manzanares y se puede acabar bastante harto del tapicero o del frutero. Por contra, el sector no es malo, es un buen lugar para la gente que empieza y también, cuando la disponibilidad de tiempo aprieta las agendas, ya que está a tan solo 7 mínutos del coche.

Resumiendo mucho, el sábado nos encajaba porqué teníamos que ver puertas y laminados para la casa... y nos encontramos con una zona no menos atestada que la calle Preciados en Navidad... Estaba lleno de cursillistas, vimos gente del Salamandra y cascos de Todo Vertical... el resultado era echarle paciencia o irnos. En realidad, esta es una zona de iniciación, con solo 15 vías y la marabunta jugaba en casa, así que le echamos paciencia y fuimos haciendo lo que nos dejaban con santa resignación. Lo mejor es que Gema volvió a "mojar" y se trajo su primer Vº Al Flash, estamos hablando de "Por la placa cuesta más" una vía que exige moverse. Yo por mi parte, rematé al primer pegue "El Solitario" un 6b+ que había quedado pendiente de una anterior escapada de viernes tarde.

El domingo andábamos despistados con lo del cambio de hora y, aunque la idea inicial nos hubiera llevado a Tres Coronas, nos plantamos en el mismo sector, con miedo a encontrarnos el overbooking del día anterior. Sin embargo, no fue así, algo bueno debíamos de haber hecho, y nos vimos allí totalmente solos, y así permanecimos hasta que fue la hora de irnos. nos fuimos contentos y jodidos: por un lado Gema se encadenó otra buena vía de quinto "En honor a los de antaño", después de haberlo pasado bastante mal en un pegue anterior, y jodidos, porqué se tenía también que haber llevado "La autopista de Maroto" que dejó pendiente de encadenar, después de haber pasado sobrada por la parte difícil de la vía. Lo mismo sucedió en mi caso, estuve a una vía de encadenarme todo el sector practicamente a vista, pero "Mary Pompis" (6c), me lo impidió, y no porqué fuera difícil, sino porque sencillamente hay cosas que a veces suceden que no se pueden explicar. Gema y yo estamos obligados a volver, no era mi idea, pues el Gusarapo no me enamora nada, pero tener dos proyectos juntos en un mismo sector pica lo suficiente para no dejarlos pendientes. Eso sí, en sábado ni de coña.

lunes, 16 de marzo de 2009

metido en una Historia de Montaña

El escalador enmascaradoEn mí búsqueda de compañeros para escalar en La Pedriza este "finde", Carlos me había sacado las castañas del fuego el sábado en nuestra visita a Colina Hueca, pero aun quedaba un día y había que aprovecharlo como si fuera oro.

El viernes lancé un globo sonda al ciberespacio y Vlady lo interceptó como si fuera una pelota de béisbol. No nos conocíamos, pero sabíamos de nuestras peripecias y ya habíamos coincidido en el espacio-tiempo una vez. Lo justo para decir aquello de "Oye tío ¿Tú no eres tal? -Pues yo soy cual. Encantado aquí un amigo".

Como Vlady ejercía de anfitrión y yo de gustoso invitado, estaba decidido a embarcarme en lo que propusiera, sin poner ni un pero ni añadir una coma. De esta manera acabé convirtiéndome en un personaje de sus Historias de Montaña y no en protagonista de una de mis propias aventuras... y yo encantadísimo.

-A las 9.30 en Cantoco y mejor si es un poquito antes ¿vale?

"La primera en la frente" pienso. Odio madrugar, lo primero que haría si fuera rico es bailar claqué sobre el despertador y encima con la paliza del sábado acuestas...

- Vale tío, allí estaré.

Y allí estuve. No me había bajado aún del coche y Jose Miguel (de Al filo de lo improbable) me toca el cristal con los nudillos... Como no le conozco y hay un pifostio de gente increíble, pienso que he hecho algo indebido con el coche, no sé, igual he atropellado una mochila o he rozado a alguien...

- ¿Sí?

-¿Eres Alberto?...

-Pues sí. y veo como sonriente me da la mano. Levanto la vista y veo a Vlady que también me saluda sonriente...

"Parecen majetes". Pienso y, en cierto modo me quito una tensión que no sabía que tenía.

Aparco, nos presentamos en condiciones y me comentan sus planes... Ya no vamos a las Buitreras, Vlady se presenta con la única guía de La Pedriza que no tengo (y tengo 5), concretamente con una de Tino Nuñez de las mejores escaladas de la zona centro, y me señala con su dedo índice una página.

-Mira ésta, a ver que te parece.

La segunda en el pecho. Bajo su dedo veo una escalada clásica, en un risco del que no había oído hablar "La Bola de San Antonio". 7 largos 7. De nombre Route 66.6 y unas reseñas escasas (en la línea del autor de la guía) que escupen un largo de 6c+ /A1 (que en ese momento no se ni lo que es) y otro de 6b, a saber Dios, como estaría de protegido.

- Me parece perfecto.

Lo que de verdad me gustaba del plan, era que el risco en cuestión estaba dentro del Hueco de las Hoces, un paraje singular, abrupto, poco transitado y de una belleza aplastante. Sin embargo, no es precisamente un lugar para pasear. Ya había estado allí 2 veces antes, pero en sentido descendente; la primera fue con María y Lola y lo pasamos un poco mal porqué nos salíamos continuamente del camino y se nos agotaba la luz del día... desde luego que este no es el mejor sitio para que te pille la noche. La segunda fue con Javi después de escalar la Ignatius y también nos despistamos varias veces del camino.

Al tran tran, llegamos a pie de vía. El camino es largo y da para irse conociendo un poco. Cuando nos ponemos los arneses ya no somos tres desconocidos.Ni me planteo hacer un largo de primero, las dificultades de la vía no me impresionan, salvo el 6c+/A1, pero no estoy habituado a instalar yo los seguros y no quiero cometer errores, gustoso me hago cargo del "mochilon de pared" y acepto mi papel secundario en esta aventura.

La escalada va más o menos bien hasta que llegamos al largo de 6b, Vlady lo pasa regular pero se tira el largo como un jabato: protegiéndolo, escalándolo y echándolo arrestos en la desconocida parte expuesta. Al salir yo se me escapa el gato de una contraposición en la pared y resbalo hasta el suelo... no pasa nada, varios raspones para la colección y punto. Lo que si hago es dejar la mochila en la reu, es una Quechua Vuarde de 40 litros y es lo más antiergonómico que existe para escalar con ella. liberado del monstruo y al tope rope, no me corto un pelo en acerar todo lo que voy encontrando a mi paso... evidentemente falta un parabolt en la placa de salida de la travesía, que es fácil, pero que si se te va un pie te das un péndulo que te da la risa. A medio largo Jose Miguel decide no subir, no lo ve claro y no quiere ser un lastre. Por unanimidad nos retiramos sin sentimiento alguno de culpa... no nos faltaban razones: Faltaba el largo de 6c+/A1, no íbamos a hacer cumbre porque no llevábamos zapatillas para bajar andando y sobre todo, porqué no nos apetecía separarnos.

En el regreso estábamos los tres de buen humor y no paramos de cascar. Las risas atenúan el dolor de las castigadas piernas y nos hacen volar hasta Cantocochino. Inmediatamente ingerimos cerveza, durante la ingestión, echamos un ojo a las fotos y, tras alegre conversación damos por finalizada esta Historia de Montaña de saldo netamente positivo.

Colina Hueca - La Pedriza

Este fin de semana se presentaba necesariamente diferente, Gema no iba a estar por los madriles y a mí me quedaban dos opciones, o bien poner rumbo a Cuenca y Valeria con mis queridísimos Javi, Susana, Alex and Cía. o bien, permanecer en Madrid y apurar los últimos sorbos de la temporada pedricera.

Normalmente mi elección hubiera sido coger los trastos y hacerme un hueco en la expedición a Cuenca... principalmente por lo grata que me resulta la compañía de estas personas y por lo divertido que es escalar con ellos. Pero Cuenca va a ser un destino recurrente en poco tiempo y La Pedriza se evapora a medida que llega el calor... Además, he empezado a cogerle el gusto a sus aproximaciones, a sus vías y hasta a pasar tensión en alguno de sus pasos... definitivamente le he cogido gusto a escalar aquí y hasta finales de este mes, voy a apurar sus vías todo lo que pueda.

Andábame yo en la búsqueda de un amigueCarloste con quien dar rienda suelta a estas ansias pedriceras, cuando en estas, Carlos da un paso al frente y se apunta... Carlos quiere vencer su miedo a escalar de primero, y yo quiero escalar algo que no me canse demasiado, pues el viernes estaba un poquillo flojo físicamente; por otro lado, me apetecía hacer mucho volumen de lo que peor se me da: la adherencia pura y por último había que tener en cuenta el calor. Metiendo todos estos condicionantes en la coctelera el resultado fue la visita a Colina Hueca. Un sector con las chapas cerquita, con muchas vías fáciles y también con vías duras. Una zona nueva para Carlos y para mí, que nos nos defraudó en absoluto.

El sector tenía ambientillo, pero la gente era encantadora y no nos sentimos agobiados, conocímos a una pareja muy maja, Susana y Roberto, que volvían a escalar depués de 5 años , lo cual nadie hubiera podido adivinar, sobre todo, después de ver la decisión con la que Susana tiraba millas rumbo a la reunión.Susana y CarlosMás tarde conocimos a Antonio y a Manuel, su compañero de cordada. Antonio quiere empezar un blog y quizás alguna de las fotos que le hice supongan el empujón definitivo.
Antonio en Despedida de SolteroNos lo pasamos bien y logramos objetivos... en parte. Carlos abrió 5 vías y yo no conseguí encadenar el que hubiera sido mi primer 6b+ de adherencia pura. No obstante estuve cerca y me dejó buen sabor de boca y muchas ganas de repetir.

El Secretivo

Un secretivo, en la jerga de los escaladores, es una zona de escalada que no se hace pública, por distintas razones. Una de ellas, como el caso que nos ocupa, es porqué por su tamaño y proximidad a determinadas localidades de Madrid, produciría su inmediata masificación, de la cual derivaría su inutilidad como zona de entrenamiento de los locales y, probablemente, tensiones con los dueños de las fincas donde se encuentra.

Es por esto, que estas pequeñas zonas se guardan celosamente en secreto por su equipadores y es por esto también que, cuando uno es invitado a compartirlas, debe sentirse tanto privilegiado como sensibilizado con las condiciones de la invitación, que implican la no difusión de la misma.

Escribo esto porqué me ha hecho mucha ilusión que los principales promotores de este secretivo, me ofrecieran la posibilidad de compartir su espacio con ellos y porqué nunca antes me había sucedido. Mil gracias bichos.

lunes, 9 de marzo de 2009

Sector Miguel Angel Blanco, última cruz... por ahora.

Ayer pudo haber sido el colofón a un buen fin de semana de escalada... Pero cuando finalmente pasé la cuerda por la cadena de la "Superguapísima", la última vía que me quedaba por encadenar de este sector (hasta 6c) no estaba contento del todo.

Primeramente el sábado no tuve mi mejor día personal y cometí un error que pudo haber costado un disgusto serio. Resumiendo, me ofrecí para mostrar a una pareja de amigos que era eso de la escalada. Subimos a Tres Coronas y cuando creí que estaba todo controlado les dejé de prestar atención mientras uno descolgaba al otro, además le pedí que durante el rapel volviera a chapar las cintas de la pared para dejar montado un segundo tope rope... Resultado: Un péndulo contra una roca del suelo... imperdonable... y previsible. Gracias a Dios, o al ángel de la guarda de los escaladores o a que se yo... la ostia fue contra el costado y contra la arista más roma de la roca... no quiero pensar que hubiera ocurrido si se da contra su esquina afilada y golpea con un riñón o contra la columna... No sucedió por menos de un palmo y la cosa acabó en un fuerte golpe, una bajada de tensión pasajera y ganas de vomitar... Lo siento en el alma... y tomo nota.

Por si no hubiera acabado de reforzar "nuestra amistad" al final del día pruebo una vieja enemiga mía, "El Mensaje del mago" un 6b+/6c de pura adherencia y no salgo de la primera chapa... Me chino y me da por no hablar con nadie en la siguiente media hora... Me pasa raras veces en esto de la escalada... pero me mosqueé con el mundo y lo pagué con quienes tenía cerca... Mea culpa, no es justo y no tengo argumentos válidos para buscarme explicación a mi mismo.

El domingo volvimos a la carga, Gema, que no se como me aguanta, y yo. Tenía cierta ilusión por escalar con los dos Joses de Tielmes y sus chicas. Apenas conocían Quebrantaherraduras inferior y quise mostrarles una escalada más característica de aquí y por qué no decirlo... probar con ellos "La Superguapísima" mi proyecto pendiente. A Gema le aguardaba "Doble Gerundio" (V+) y para el resto de chicas "La Guapa". El problema fue que cuando llegamos ya se nos habían adelantado otros y acabamos emigrando a la parte superior del sector, mucho menos conocida y bastante más solitaria. Allí esperaban "La amenaza de Apophis" (V+) y "Apostando por el Trece" (6b). También había otras dos vías, un 7b+ y un 7a que obviamos con elegancia.

Me gusta explorar terreno desconocido, y dar con el camino de acceso a las vías me resultó divertido. Casi llegando a pie de vía, un escalón de 1`60 m de alto nos detiene, la roca está húmeda y un tropezón nos manda 15 metros más abajo rebotando entre rocas... buscamos alternativas y no damos con ellas. Este es el camino y por aquí hay que pasar. Uno de los Joses coge el toro por los cuernos y abre el camino que luego recorremos los demás, eso sí con mucho cuidado de evitar sustos innecesarios.

Las vías son de pura adherencia y tienen una reunión común. El granito está tan "nuevo" que a pesar de ser súper rugoso, se deshace al pisarlo como si fuera arenilla... El Vº no es nada fácil y hay que apretarlo; eso sí, siempre desde el punto de vista de una persona que no practica pura adherencia habitualmente. Muy apurado chapo la reunión y, poco a poco, todos los demás van "pasando por caja". Veo desilusión en sus caras... la misma que yo sentí al probar las vías de La Pedri por primera vez...

__¿Qué coño es esto? - ¡Y encima las chapas a tomar por culo!

Jose ha encadenado 7b y tiene 7a a vista y las pasa putas, el otro Jose ni siquiera se decide a escalar de primero... El miedo es una sensación contagiosa y las chicas ya están derrotadas antes de empezar.

El 6b no iba a ser mejor... lo único bueno es que los dos primeros seguros se chapan fácilmente y eso le quita hierro al asunto... La verdad es que para mí son dos buenas vías y que los seguros están puestos correctamente, pero escalar adherencia pura es chocante y a nuestros amigos les deja mal sabor de boca.

La SuperguapísimaFinalmente bajamos al nivel "popular", Gema encadena de nuevo "La Guapa" y Los Joses se pegan con "Estás más negro que un grajo"... El aleje final de la salida a la placa no les mola y les veo a punto de tachar a La Pedriza de la lista de escuelas a volver... Justo en ese momento invito a Jose a probar mi proyecto... y así comienza la trepada a vista de la Superguapísima... Poco a poco va leyendo la vía y ganando altura, a media vía se encuentra una sección fácil sin asegurar y tarda unos segundos en decidirse... finalmente cruza los 3 o 4 metros hasta el siguiente seguro y lo chapa... desde abajo, se que le está gustando. En ese punto hay un descanso muy bueno y desde ahí solo falta el arreón final compuesto por una placa lisa que al principio tiene algunas ñapitas y finalmente se convierte en adherencia pura..., poco a poco va chapando los dos parabolt que salen a su paso hasta que ya solo queda la cadena por encima de él y entremedias, el paso más duro de toda la vía... El tío se la saca dinamizando a tope hasta la cadena y el resultado es un pedazo de vía encadenada a vista.

El grupo celebra el encadene y poco más tarde le sigo... pero con un pegue más entre medias y otro de la semana anterior.

No sería justo decir que he encadenado todas las vías de este sector hasta las posibilidades de mi grado, es decir, 6c. No sería justo porque estaría legitimando de alguna manera lo sucedido con "Escolopendra", "Hot Pants" y "Picotari", tres 6b+ de prometedoras líneas que algún tonto del culo, en base a argumentos absurdos, ha decidido desequipar, echando por tierra el trabajo, el dinero y la ilusión de sus creadores y robándonosla a toda la comunidad escaladora. No se trata de defender que se pueda equipar en cualquier parte, sino que en este caso, el afán de protagonismo de un abrazafarolas, que diría García, ha dejado sin seguros un bordillo de roca de 15 metros en donde solo es lógica la escalada deportiva y, donde no existe zona de nidificación de aves. El otro pseudo argumento... lo de mezclar la política con la escalada, es tan del género tonto, que no perderé ni una línea más en explicar que dos y dos son cuatro y cuatro por cuatro dieciséis.

No soy equipador, pero si alguien de buena fe se anima, le cedo gustoso los parabolt que hagan falta y las reuniones. Sería un placer.

domingo, 1 de marzo de 2009

La Superguapa (2). La Pedriza. Sector Miguel Angel Blanco

¡Por fin cayó la Superguapa! (6c) Sinceramente todos tenemos un ego y el mío ha hecho músculo al encadenar esta barbaridad de línea, esta maravilla absolutamente perfecta, esta obra de arte. Quizás no sea casualidad que las dos vías que mejor sabor me han dejado estén en este sector, la otra es la "Tragedia del 12 y 13 de julio de 1997"

Tres visitas. 7 pegues en total. Al segundo, del día de hoy. Joder, que pasada... realmente buena. ¡Pero que pasada de techo! Y lo mejor, a parte de encadenar en tres días una vía que ni en mis mejores sueños, es que al final todos pudimos celebrar cosas, Gema encadenó su proyecto, Carlos también... el ambiente a pie de vía era de puta madre, y el tiempo acompañó... Supongo que se puede pedir más... pero yo me conformo.

Al final todos volvimos con una vía en la cabeza, la mía se llama "la Superguapísima".